¿Sabías que el 80% de abortos o fallos de implantación son cromosómicos y que los hombres pueden tener mucho que ver en esto?

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la infertilidad se define como la incapacidad de una pareja sexualmente activa que no emplea métodos anticonceptivos de lograr un embarazo durante el transcurso de un año.

Aún así entre un 10-15% de las parejas no lo consiguen después de este tiempo. Aunque diferentes estudios muestran un incremento de la infertilidad en las últimas décadas, actualmente se estima que en países desarrollados aproximadamente el 15% de las parejas van a consultar por infertilidad.

En este sentido, la pareja debe saber que la infertilidad afecta tanto a hombres como mujeres a partes iguales.

Es muy frecuente que culpemos siempre a las mujeres, por endometriosis, problemas de coagulación, autoinmunes o mala reserva ovárica en muchos casos debida a la edad.

Bien pues esto no es así, los hombres pueden tener mucho que ver. Es algo que he investigado recientemente gracias a las aportaciones de una paciente que vi en Barcelona recientemente y que me ha hecho investigar sobre este tema.

Como me gusta decir una de mis mejores fuentes de aprendizaje son mis pacientes, que al compartir sus experiencias me abren nuevos horizontes y me hacen mantenerme en constante aprendizaje.

Bien, pues si queremos obtener éxito en un tratamiento de fertilidad, es necesario estudiar la carga genética del esperma, especialmente la fragmentación de la cadena simple y doble.

Un estudio con el banco de donantes ha puesto de manifiesto que el 35% de semen de donante considerado saludable,  presenta fragmentación de doble cadena, lo que provoca una tasa de aborto del 50%, frente al 20% de abortos que se produce en donantes que no presentan fragmentación.

Todo esto es lo que se está investigando en el centro CIMAB (Centro de Infertilidad Masculina y Análisis de Barcelona), fundado en Octubre de 2011, por el Dr. Agustín García Peiró.

En este centro puntero en fertilidad, llevan a cabo una técnica innovadora, llamada CometFertility, en la que estudian si la rotura de la cadena de ADN del esperma es de cadena simple o doble. Las roturas de cadena sencilla están relacionadas con el estado de infertilidad masculina, mientras que las roturas de cadena doble están relacionadas con un mayor riesgo de aborto aportado por el espermatozoide.

Además en este centro ya saben que la dieta es un factor clave para mejorar la fertilidad, especialmente en cuánto al aporte de antioxidantes.

En un estudio en el que administraron a 20 pacientes infértiles con un diagnóstico de astenoteratozoospermia: 1500 mg de L-carnitina, 60 mg de vitamina C, 20 mg de coenzima Q10, 10 mg de vitamina E, 10 mg de zinc, 200 mg de vitamina B9; 50 μg de selenio; 1 μg de vitamina B12 durante un período de 3 meses, los resultados mostraron una mejora significativa de la integridad del ADN.

Los datos de análisis de semen mostraron un aumento significativo en los parámetros de concentración, motilidad, vitalidad y morfología. Estos  resultados sugieren que el tratamiento antioxidante mejora la calidad de los espermatozoides no solo en términos de parámetros seminales y daño basal del ADN, sino que también ayuda a mantener la integridad del ADN.

La administración previa de antioxidantes podría, por lo tanto, promover mejores resultados después de las técnicas de reproducción asistida.

Actualmente el tratamiento dietético que se está recomendado es evitar todos los estimulantes, xantinas como cafeína especialmente, presente en el café, té, chocolate y se está administrando curcumina con piperina, como primer antioxidante, ya que ha mostrado aún mejores resultados que los anteriores estimulantes.

La cafeína afecta a los sistemas de reparación del ADN tanto del óvulo como del esperma y se ha observado que tomando estimulantes hay un 20% más de daño de ADN. A los 3 meses de iniciar el tratamiento dietético y con la suplementación de curcumina, el ciclo de espermatogénesis se observa que el 75 % están en valores de normalidad.

En algunos centros no recomiendan en cambio la curcumina para mujeres, por su acción anticoagulante y porque administrada vaginalmente es cierto que ha mostrado actividad anticonceptiva, sin embargo en este punto no estoy totalmente de acuerdo, personalmente hemos ayudado a conseguir muchos embarazos y en muchos de ellos la curcumina ha sido parte fundamental del tratamiento, cada caso hay que personalizarlo y si la paciente presenta problemas digestivos, puede ser de gran ayuda, ajustando bien la dosis, por supuesto…

Por otro lado sabemos que la curcumina es gran aliada en el tratamiento de endometriosis, que en muchos casos puede ser otra de las causas relacionadas con la infertilidad.

Es importante saber que el embrión tiene sus estrategias para arreglar fallos cromosómicos pero a veces no puede repararlos.

Por tanto una vez más demostramos que la dieta es un factor clave en el tratamiento de muchas patologías incluida la fertilidad, tanto masculina como femenina. La medicina del futuro debe ser una medicina integrativa, donde medicina, biología y nutrición, trabajen de la mano para conseguir mucho mejores resultados. Que algo sea de procedencia natural no significa que no sea científico….