Rosa López Monís

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Algas marinas y su riqueza en nutrientes

Hoy en día conocemos unas 45 mil especies de algas, de las que al menos mil son comestibles.

En este artículo quiero hablar de las valiosísimas propiedades que presentan las algas.

Podemos definir las algas como las plantas del mar, pudiendo crecer tanto en agua salada como en agua dulce.

Entre sus propiedades debemos destacar su riqueza en nutrientes, destacando los minerales y entre ellos hay que mencionar la riqueza en calcio, presentando muchas de ellas como el alga wakame hasta 10 veces más Calcio que la leche, por lo que resultan muy beneficiosas para personas con osteopenia u osteoporosis y su gran riqueza en yodo, mineral indispensable para el buen funcionamiento de la glándula tiroides. Destacar su riqueza en vitamina C, betacaroteno, vitamina E, K, magnesio, potasio, manganeso y entre sus grasas, destacar la presencia de omega 3. Las algas son también muy ricas en polisacáridos que les confieren la propiedad de saciar, ya que no son digeribles por las enzimas humanas, por lo que son alimentos muy indicados en el sobrepeso. Estos mimos polisacáridos le otorgan a muchas algas sus maravillosas cualidades como quelantes de metales pesados. Es por ello que podemos afirmar que son estos polisacáridos los que le otorgan a las algas estas maravillosas cualidades.

A diferencia de los monosacáridos de las plantas terrestres en las algas predominan el ácido glucurónico, la galactosa, la manosa, la fumosa, la xilosa, el ácido algínico… que son muy interesantes para la salud. Por ejemplo la manosa, la cual se encuentra en la mayoría de las células del cuerpo ayuda a la formación de mielina y está presente en las células que forman la superficie de la pared de la vejiga, siendo muy eficaz en casos de cistitis. O el ácido glucurónico, que se combinan en el hígado con tóxicos  que luego salen al exterior a través de la orina, ácido también presente en el cartílago y el líquido sinovial.

Por otro lado los polisacáridos de las algas poseen otra cualidad muy interesante que los diferencia de los polisacáridos de las plantas terrestres y es que se trata de polisacáridos sulfatados, que han demostrado su eficacia como antivirales, habiendo obtenido resultados prometedores, contra el virus de la enfermedad de Newcasltle, hepatitis C,  pero también como antifúngicos,  antibacterianos, antiinflamatorios y anticancerígenos. Cabe mencionar que el alga roja conocida como Musgo de Irlanda es una de las algas que mayor proporción presenta de estos polisacáridos, la mayoría de ellos carragenanos, los cuáles han sido motivos de polémica por estudios contradictorios.

La Universidad de Malta publicó en enero de 2017 en Neuroscience Letters un estudio dirigido por Michelle Briffaa, donde in vitro se observaron  las propiedades de un alga marrón, la Padina pavonica, cuyo extracto destruyó las placas de proteínas amiloideas neuronales que caracterizan enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson.

Por todas estas propiedades recomendamos el consumo de algas como un alimento habitual de nuestra dieta. A continuación mencionaré las tres principales algas de uso alimentario

Alga Kombu

Es un alga parda y la más larga del mar. Originaria de Japón. Posee un sabor dulzón al contener fructosa. Es rica en lamininas y laminanaros, que ayudan a controlar la tensión arterial ácido glutámico, que ayudan en el proceso de la digestión, ácido algínico, que nos proporciona sensación de saciedad, ayuda a regular el tránsito intestinal y a bajar el colesterol, ya que es capaz de absorber parte de las grasas, que serán expulsadas con las heces.

Es el alga ideal para cocinar las legumbres, consiguiendo hacer más digerible esa comida ya que reblandece las fibras insolubles, por su contenido en ácido glutámico, que no solo mejora la digestión, sino que nos ayuda a expulsar flatulencias. Además contienen un buen nivel de hierro, calcio, potasio y una de las algas más ricas en yodo. Posee importantes propiedades terapeúticas, gracias a sus polisacáridos fucoidinas, que le otorgan propiedades como antiinflamatoria, inmunomoduladora, antiangiogénica, además induce la apoptosis de las células cancerosas y es especialmente eficaz en casos de artritis

Alga Wakame

Segunda alga parda más consumida, pro su suave sabor y textura y por su fácil preparación. A diferencia del alga kombu, solo necesita unos minutos de cocción. Posee al igual que el alga kombu, ácido glutámico, que ayuda a reblandecer las fibras de las legumbres, en sopas o ensaladas están deliciosas, pienso que son una de las mejores algas para iniciarte debido a su sabor delicado.

Ambas algas, kombu y wakame, son muy antioxidantes, ya que son ricas en pigmentos como clorofila y xantofilas. Es el alga que mayor contenido en calcio presenta. El wakame tiene asimismo propiedades antivíricas, sus polisacáridos son eficaces ante los virus del herpes HSV-1 y HSV-2 así como ante el citomegalovirus. Además presenta otras propiedades interesantes, como inmunomoduladora, anticancerígena… Se ha relacionado incluso con la baja incidencia de cáncer de mama en las asiáticas, por el consumo de yodo.

Alga Nori

Es conocida por ser el alga que se usa en la preparación del sushi, suele provenir de cultivos, que una vez se recogen se secan al sol o en hornos extendida en pequeñas cantidades sobre esteras de bambú. Realmente designa a un grupo de algas (las más frecuentes son Porphyra umbilicalis, Porphyra tenera y Porphyra yezoensis). Son algas rojas, debido a que presentan una proteína llamada ficoeritina. Este grupo de algas es muy interesante en dietas vegetarianas y veganas, ya que presentan en cantidades nada despreciables dos nutrientes críticos en estas dietas: B12, y taurina. Ha demostrado ser la mejor fuente de vitamina B12 vegetal, como podéis ver en este estudio.

Destacan también por su alto contenido en proteínas, ya que más de un cuarto de su contenido corresponde a proteínas.