Enfermedades Autoinmunes.
Parte 3. Papel de la dieta.
Existen otro alimentos que según que autoinmune presentes pueden estar indicados eliminar, al menos un tiempo.
Vamos a mencionar algunos de ellos.
Por ejemplo, en pacientes con artritis o reuma, las solanáceas, puede empeorar un brote. Hace falta investigar más la relación de las solanáceas con las articulaciones, hay varias teorías, unas apuntan al contenido en solanina, que en dosis altas puede ser tóxico, como el que se puede encontrar en patatas muy verdes…
Otra de las teorías tiene que ver con la síntesis de vitamina D. Hay evidencias de que en animales, las solanáceas puede provocar dolores articulares y óseos, mayormente relacionados con la forma en la que el cuerpo de los animales procesa la vitamina D. Parece ser que las solanáceas generan de forma natural moléculas (metabolitos) de una forma muy activa de Vitamina D, la D3, que puede impedir el metabolismo del calcio en el cuerpo, haciendo que se formen depósitos de calcio en tejido blando (ligamentos, tendones, etc.) en lugar de en los huesos. Sin embargo, en los seres humanos, la vitamina D no se sintetiza de la misma manera que en otros mamíferos.
Respecto a déficit de nutrientes otras autoinmunes como la esclerosis múltiple, suele asociarse con bajos niveles séricos de vitamina D. Un alto consumo de grasas saturadas animales parece también estar relacionado con la enfermedad, por lo que la grasa culinaria debe ser de origen vegetal como el aceite de oliva virgen. Los AGP-ω3 son recomendados en este tipo de enfermedades por su relación con los procesos inflamatorios.
En un lupus es conveniente mantener al paciente con una dieta baja en sal, ya que suele asociarse con nefritis.
En las enfermedades inflamatorias de intestino, como Crohn o colitis, puede ayudar la eliminación o reducción de legumbres por unas semanas, para reducir las lectinas, aunque sobre este tema hay mucha controversia y no tenemos suficiente evidencia. Mi recomendación en este caso suele ir individualizada a la sintomatología que presenta el paciente al comer legumbres. El tema de eliminar legumbres es por su contenido en FODMAPs, que son carbohidratos de cadena corta y alcoholes, que aumentan las fermentaciones intestinales y pueden agravar el SIBO o por el controvertido tema de las lectinas. Las lectinas ayudan a las plantas a defenderse, y algunas presentes en las legumbres son tóxicas, es algo que hemos sabido desde siempre: por eso las remojamos y cocinamos, pues con la humedad y la temperatura se descomponen, se asocian con hidratos de carbono y resultan inactivadas. Parece ser con el remojo destruimos el 98% y el resto al calentarlas. Os comento que con esto hay mucha controversia, porque también se han atribuido propiedades anticancerígenas a las lectinas presentes en las semillas del tomate y de las legumbres y es bien cierto que la dieta vegetariana se asocia con mejor calidad de vida.
Respecto al alcohol, en cierto que el vino tinto nos aporta resveratrol, pero lo podemos obtener de las uvas igual. Según varios estudios, el consumo excesivo de alcohol puede debilitar nuestro sistema inmunológico, haciendo del cuerpo un objetivo más fácil para las enfermedades. Esto se debe a que las células de defensa se ven afectadas por el consumo excesivo de alcohol.El uso crónico y pesado de esta sustancia reduce el número de linfocitos T periféricos y también parece causar la pérdida de linfocitos B periféricos - ambos relacionados con la defensa del cuerpo.
Pacientes con problemas tiroideos agudos, pueden beneficiarse retirando un tiempo alimentos goitrogénicos, como explicamos en este vídeo.