¿Qué hace la clorofila en tu cuerpo?
Introducción
La clorofila es el pigmento verde que hace posible la fotosíntesis en plantas, algas y algunas bacterias. Gracias a ella las plantas captan energía solar y producen oxígeno.
Pero también en los humanos, la clorofila tiene efectos positivos: ayuda a detoxificar, regenerar tejidos y mejorar la calidad de vida en general. Veamos cómo funciona en tu organismo y por qué conviene incluirla en tu dieta.
Beneficios principales
Desintoxicante natural
La clorofila tiene una estructura muy similar a la hemoglobina, pero con un átomo de magnesio en lugar de hierro. Esa capacidad para unirse a otros compuestos le permite “atrapar” metales pesados como plomo o mercurio y facilitar su eliminación. Por eso se utiliza en protocolos de desintoxicación.
Regeneración y oxigenación
Como se parece a la hemoglobina, puede favorecer la producción de glóbulos rojos y mejorar la oxigenación de los tejidos. Esto la hace útil en casos de anemia leve o fatiga crónica.
Cicatrizante y antiinflamatoria
La clorofila estimula la reparación de la mucosa intestinal, por lo que es una gran aliada en gastritis, úlceras y síndrome de intestino permeable. También puede reducir la inflamación de las encías y acelerar la curación de heridas.
Neutraliza olores y toxinas
El mal aliento o los olores corporales intensos a menudo tienen su origen en un intestino disfuncional o en una mala detoxificación hepática. La clorofila ayuda a neutralizar estos olores desde dentro.
Antioxidante
Ayuda a neutralizar radicales libres y protege las células del envejecimiento prematuro.
Cómo incluirla
La encuentras en espinacas, acelgas, perejil, espirulina y suplementos líquidos o en cápsulas. Una dieta rica en hojas verdes es la forma más natural de obtenerla.
Conclusión
La clorofila no es solo “verde”: es una molécula con potencial enorme para tu salud. Incluirla en tu alimentación es un gesto sencillo que puede ayudarte a sentirte mejor desde dentro.